Apple puede estar preparando una de las mayores revoluciones en salud móvil, según diversos rumores: la monitorización de todas nuestras variables básicas de salud a través del teléfono o la tablet. Los dispositivos móviles, integrados con el móvil y la tablet, para la monitorización de la salud están convirtiéndose en un negocio boyante en el que las grandes compañías de electrónica de consumo y de deporte han entrado a lo grande, como demostró la feria CES celebrada en Las Vegas. Por eso no podía faltar en este mercado el mayor gigante de todos, Apple, quien puede barrer al resto sin problemas. Diferentes medios especializados afirman que la compañía californiana está preparando una aplicación, Healthbook, que se integrará en los dispositivos iOS de próxima generación (incluyendo el llamado «iWatch«) para el seguimiento de todas las variables relacionadas con la salud desde un dispositivo móvil, como la presión arterial, el nivel de hidratación, la frecuencia cardíaca y las mediciones del nivel de glucosa. Estos plantes coinciden con la reciente contratación por Apple de Michael O’Reilly, que fue el director médico y vicepresidente ejecutivo de asuntos médicos de la firma de pulsómetros Masimo Corporation. O’Reilly se reunión con la FDA (la agencia estadounidense de control del medicamento) en diciembre para tratar de aplicaciones médicas, según estos medios.
La aplicación pretende convertirse en una solución integral para la salud, y por eso, según las publicaciones que han recogido estos rumores, no dejará nada a la competencia. Así, podría incluir, como los dispositivos relacionados con el ejercicio, la distancia recorrida, los pasos, la ingesta diaria de calorías y el peso. También un recordatorio de toma de medicamentos.
En la actualidad, el hardware de Apple ya permite medir la distancia recorrida pero para algunos datos corporales necesitaría un dispositivo periférico, como un reloj que incorpore un termómetro, un sensor de respuesta galvánica de la piel, oxímetro, etc.
El lanzamiento de esta aplicación es un misterio, pero se supone que será este año si tiene los parabienes de la FDA. Lo que no cabe duda es que si eso se produce provocará una revolución tan grande como la que ocasionó el iPod, el iPad y el iPhone.
La duda que nos queda es ¿qué pasará con la confidencialidad de los datos? ¿tendremos la seguridad de que no acaben en las manos equivocadas?